Joseph Alois Schumpeter, político y economista alemán (1883-1950), no dudaría hoy, en hacer una referencia directa o indirecta al software en su definición de innovación. Para este presente y, también en un futuro inmediato, podríamos plantear un paradigma de innovación definido por software (SDI).
El software: de herramienta a negocio en sí mismo
Desde los cálculos necesarios para mandar un cohete al espacio, fabricar un automóvil o entender el ADN humano hasta la capacidad de hacer una compra desde nuestro móvil, todo está atravesado por el software. Software Define es el término que fue acompañando diversas tendencias desde principios de los años noventa y que desde 2013 es conductor natural en numerosas iniciativas del networking, nuestro ámbito.
La informática, antigua herramienta al servicio de los procesos administrativos o técnicos concretos, ha pasado a ser el elemento transformador y generador de nuevas oportunidades. Desde el nacimiento del router pasaron treinta años que lo transformaron todo, fundamentalmente LA RED, dándole a ésta un sentido de ubicuidad, criticidad y permanencia indispensable que antes no tenía. 2020 fue un año que puso a la red (pública/privada) a la altura de las circunstancias.
Los desafíos que nos presenta la red hoy
La masividad de dispositivos, la diversidad de aplicaciones, los nuevos sistemas de almacenamiento y desarrollos basados en cloud, así como las demandas de agilidad y velocidad a la hora de provisionar ciberseguridad, despertaron nuevas necesidades y requerimientos, por parte de los clientes.
Se puede decir que estas demandas aceleraron el cambio, ya que la red fue evolucionando desde el inicio del router multiprotocolo, pasando por el router multiservicio o de servicios integrados, hacia redes colaborativas, concluyendo, recientemente, en la tendencia de la red definida por software, más conocido como SDN (por sus siglas en inglés de Software Define Networking). Innovación disruptiva, no incremental.
Pero ¿qué tan disruptiva es la tendencia de SDN en comparación con los procesos de cambio incremental (más performance/nuevos features) que veníamos viviendo en las redes? Inmensa. Esta es la palabra que mejor encaja para describir la diferencia entre continuar trabajando con un modelo de red tradicional y pasar a operar y administrar las soluciones de SD-Access, ACI o SD-WAN de Cisco.
¿Qué consideraciones se deberían tener a la hora de adoptar en una solución Software Defined de Cisco?
Una respuesta conveniente podría fundamentarse atendiendo a los siguientes supuestos:
– La definición y el nivel de automatización objetivo para los casos de uso que los clientes plantean.
– La capacidad y solidez de los sistemas a implementar.
– Los recursos (económicos, de servicios profesionales (capacidades técnicas de los recursos humanos que van a “definir/operar” la red) y el tiempo necesario para implementarlo).
– Un plan de adopción efectivo.
Atender a los cuatro puntos enumerados previamente significa no chocar con barreras de adopción a la hora de implementar.
Considerando la experiencia de más de veinte años en networking y fruto del trabajo de las últimas implementaciones en los clientes que forman parte del programa de Cisco Digitaliza (Country Digital Acceleration), la transformación que se viene es necesaria, inevitable. Tan inevitable y natural como nos resulta hoy el poder seguir trabajando desde casa disponiendo de las herramientas tecnológicas que lo facilitan.
Razones para implementar una red basada en software
Hay un cúmulo de beneficios asociados, fáciles de identificar para nuestros clientes, cuando se despliegan y usan la tecnología de SD-Access, ACI o SD-WAN de Cisco. Vamos a enumerar sólo algunos a continuación:
– Contar con un “Agente Inteligente” utilizando la plataforma Cisco DNA (Digital Network Architecture), que recibe estímulos del entorno, ya no sólo elementos de red, y genera acciones vía actuadores programables, abiertos y que deparan un futuro sin fronteras.
– La capacidad de implementar modelos de separación de tráfico (traffic isolation) y control (traffic enforcement) basados en macro y micro segmentación, con una capilaridad impensada hasta ahora.
– La mejora de productividad incremental, con mecanismos de automatización nunca antes provistos por las plataformas de gestión de red tradicional.
– Una mayor eficiencia operativa, que permite reducir los tiempos de soporte reactivo de días a minutos, incluyendo sistemas de predicción de problemas basados en Inteligencia Artificial, para comparar despliegues en las diferentes oficinas remotas, establecer modelos de base a partir del uso de la tecnología en otros clientes o tener información histórica del comportamiento de la red o, incluso, la captura de paquetes en las redes wireless de manera automatizada.
Particularmente considero que es el momento de tomarse un tiempo para pensar el futuro, un tiempo de planificación y diseño, una oportunidad para multiplicar la productividad y la operatividad de las redes, es tiempo de Cisco SD-Access, Cisco ACI y Cisco SD-WAN.
Mi recomendación es que pensemos por un momento en el paradigma del futuro de la innovación definida por software (SDI) y no solo en lo que hoy vemos en el corto y medio plazo de la red SDN, porque es allí donde residen las oportunidades reales, donde se transformarán los negocios. De hecho, Cisco DevNet, nuestra comunidad de desarrolladores que ya está formando a miles de administradores de IT en programabilidad en todo el mundo, es un buen ejemplo de esto.
Dentro de la iniciativa Digitaliza, de Cisco España, Metro de Madrid, Quirón Salud y la Generalidad de Cataluña, son algunos de los muchos clientes con los que estamos trabajando en fase de adopción y uso, incrementando la seguridad, productividad y reduciendo el coste operativo, entre otros muchos beneficios.
Me complace daros la bienvenida a la nueva era de la innovación definida por software. ¿Lo estáis considerando? Dejadme vuestros comentarios, os leo.
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1 Comentarios
¡Super interesante Juan! Hay que aprovechar ahora que cada punto de nuestros redes tienen la inteligencia para entregar este valor adicional. Los que tienen una infraestructura 2020, con una configuración del año 2000, no están recibiendo el retorno posible en esta inversión de equipos. Todavía peor, es que esto resulta en la compra de software y herramientas adicionales para resolver los asuntos modernos que las redes en 2000 no contemplaban, como múltiples subredes virtuales de equipos IoT, conectividad a la nube, amenazas de seguridad, etc.