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Cuando lo “bastante bueno” no basta


1 November 2011


Resumen de informe técnico elaborado por Cisco Systems

Adiós a los mitos de la red “bastante buena”
Centenares de clientes de Cisco han debatido sobre la conveniencia de priorizar el menor precio de un producto o servicio puntual de la red o adoptar un plan estratégico para diseñar la infraestructura de red. Gracias a los intercambios mantenidos con muchos de estos clientes, hemos podido analizar diversos diseños e implementaciones de redes.
Nuestros hallazgos demuestran que si bien es posible desarrollar una red táctica de bajo  costo, las operaciones continuas, las actualizaciones y la falta de preparación para responder a nuevos desafíos empresariales, a la larga, resultan ser obstáculos para las organizaciones. En lugar de evaluar los gastos de capital únicamente, es imprescindible que las organizaciones consideren el costo total de propiedad, las operaciones, el retorno de la inversión (ROI), y también las funciones empresariales que habilita una red estratégica, cuando desarrollan sus redes para satisfacer las necesidades empresariales de hoy y del futuro. Además, en la ecuación debe incluirse la experiencia del cliente y del empleado.
La proliferación de dispositivos sigue en aumento a la par de la demanda de movilidad; por ende, la red proporciona el contexto para garantizar el cumplimiento y la seguridad. Si a ello sumamos la tendencia a la virtualización y los servicios de cloud computing, la red se convierte en el nexo común que une todos estos sistemas y que facilita un flujo constante de inteligencia de punta de punta. Dado que las aplicaciones que se incorporan a las actividades comerciales cotidianas son cada vez más exigentes, como el video y la virtualización de sistemas de escritorio, el papel estratégico de la red adquiere una importancia aún mayor de cara al futuro. La propuesta de sacrificar funcionalidad y valor estratégico por el precio es arriesgada y, según nuestra experiencia, fracasa una y otra vez.
Principales conclusiones
    El desarrollo de una red táctica basada en productos y servicios puntuales de bajo costo aumenta el costo totalde propiedad (TCO) en la mayoría de las organizaciones en el orden del 20%-35%, como mínimo, en un plazo de tres años.
       La red es tan confiable como el eslabón más débil. El costo de una interrupción de servicios arrasa con cualquier ahorro en equipos de capital. Es como poner aceite barato en el automóvil. El eslabón más débil puede encontrarse en los productos y servicios.
     Los riesgos de no implementar una red de próxima generación son importantes. Desde el punto de vista del TCO y el ROI, una red táctica no permitirá aprovechar las ventajas de la reducción del consumo de energía, la economía de migrar con facilidad sistemas a la nube, la posibilidad de adoptar la virtualización de sistemas de escritorio y la consumerización de dispositivos, ni la posibilidad de responder a los requisitos normativos con menores gastos. Por otra parte, cabe destacar que el dinamismo de la empresa se ve seriamente afectado cuando debe renovarse de forma radical la red por las nuevas necesidades de la organización.
      Se aplica la ley del mínimo denominador común. Debido a las características inherentes de punta a punta de la red, las innovaciones de un proveedor se esfuman si no se ofrecen en las soluciones de todos los proveedores del sistema.
          En términos de garantía, servicio técnico y asistencia, lo barato sale caro.
       Cuando se trata de redes de varios proveedores, las organizaciones de TI deben dedicarse más a las operaciones y ven limitadas sus posibilidades de dedicarse a iniciativas estratégicas que aumentan el valor de negocio. Esas redes aumentan los gastos operativos y disminuyen tanto el retorno de la inversión como el valor de negocio.
          Las redes bastante buenas no ofrecen las herramientas de implementación de políticas ni las funciones de seguridad integradas que permiten a las empresas cumplir con los requisitos normativos presentes y futuros, como los de la industria de tarjetas de pago (PCI) en el sector minorista, los requisitos de la ley de responsabilidad y transferibilidad del seguro médico (Health Insurance Portability and Accountability Act/HIPAA) de EE. UU. en el sector de salud, las normas de protección de datos de Europa, los requisitos de implementación de IPv6, los estándares federales de procesamiento de información (Federal Information Processing Standards/FIPS), etc.
Recomendaciones
       Es imprescindible que los arquitectos de redes y CIO consideren un enfoque centrado en los servicios, ya sea que se trate de servicios de redes, de puntos terminales o de aplicaciones, para que las arquitecturas puedan satisfacer las mayores necesidades de la empresa utilizando el prisma del costo total de propiedad que se centra en el capital, las operaciones continuas y la implementación de nuevos servicios.
          Es conveniente que los equipos de operaciones de redes se preparen para el aumento de las necesidades de la empresa y las oportunidades que ofrecerá la red, más concretamente para lo siguiente:
o   Video: garantice que las inversiones en redes brindan la inteligencia necesaria para planificar previamente, autoconfigurar y solucionar problemas de puntos terminales y flujos de video.
o   Movilidad y consumerización de dispositivos: diseñe la red partiendo de la base de que admitirá empleados móviles que utilizan los dispositivos que prefieren.
o   Administración de energía: garantice que la infraestructura puede supervisar y administrar las emisiones de carbono; de lo contrario, deberá enfrentar severas multas.
o   Políticas de seguridad y de red: proporcione visibilidad y control ubicuos utilizando la red para implementar las políticas de seguridad.
       Es importante que los clientes consideren las evaluaciones del TCO y ROI como factores que revisten igual importancia a la hora de realizar una inversión en la red.
     Considere las necesidades futuras: una “red bastante buena” puede imponer obstáculos que limitan las posibilidades de las organizaciones de mantener su competitividad y de interactuar con sus clientes y partners a escala mundial en un contexto en el que la globalización adquiere capital importancia. No sacrifique funciones empresariales por un ahorro inicial de capital.
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