Cómo pueden evitar los proveedores de servicios que se alcancen los búferes
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Para satisfacer las cambiantes expectativas de sus clientes, los proveedores de servicios han de desarrollar nuevos métodos para diseñar y montar redes
Nadie puede negar que Internet sea ahora una parte íntegra de la forma en que las personas trabajan y se relajan. Pasamos horas viendo vídeos en streaming en servicios como Netflix y Youtube. Y consultamos en Google todas las preguntas posibles, desde dónde ir de vacaciones, pasando por las últimas noticias, hasta el significado de la vida.
Sin embargo, a medida que los servicios en línea se integran cada vez más en la vida de las personas, la importancia de ofrecer una experiencia de usuario impecable también crece. Existen numerosas demandas de la competencia para atraer la atención de la gente. Y, si una película tarda mucho en reproducirse o los resultados de la búsqueda tardan unos segundos en cargarse, los clientes cerrarán la ventana y a otra cosa.
Almacenamiento en caché del contenido para satisfacer nuevas demandas
Lamentablemente, las crecientes demandas y expectativas de los clientes hacen que estas experiencias frustrantes sean más frecuentes, y entendemos el porqué al ver cómo funciona el streaming de vídeo.
Cuando un cliente quiere ver una película en streaming, esta información se transmite desde un punto del extremo de la red, como una casa u oficina. En una red tradicional, la solicitud se transmitiría a un data center centralizado, a través de la red central, para ser procesada. Los datos que permiten ver la película en streaming se enviarían de vuelta al cliente en el extremo.
Este modelo funcionaba perfectamente. A pesar de que los datos recorrían un largo camino, iban tan rápido que no importaba. Sin embargo, estos pocos milisegundos que tardaban en llegar al data center e ir de vuelta se suman cuando la red responde a millones de solicitudes de clientes al mismo tiempo. Y, a medida que crecen las demandas en la red, también crece la probabilidad de que haya retrasos y clientes insatisfechos.
Para garantizar que satisfacen las expectativas de sus clientes, los motores de búsqueda y las empresas de streaming de vídeo han de encontrar una forma de ofrecer servicios rápidos a gran escala. Una forma de hacerlo es mantener al mínimo la distancia que los datos recorren a través de la red. Por ello, están almacenando contenido cada vez más en las capas externas de la red, porque, cuando la información necesaria para suministrar el contenido ya está disponible, no hay necesidad de enviar los datos a la red interna y viceversa.
Desarrollo de una red dispersa
Sin embargo, esta tendencia plantea un reto para los proveedores de servicios, a los que de repente se les pide que proporcionen la funcionalidad de un data center en las partes externas de la red. La buena noticia es que es posible. El reto es que se requiere una planificación meticulosa y una inversión en nuevas tecnologías.
La creación de una infraestructura de red dispersa implica el rediseño de su red en varias etapas, probablemente durante un período de años. Por lo tanto, es importante que los proveedores de servicios opten por un partner tecnológico que pueda ofrecer asesoramiento experto y soporte a largo plazo.
Las empresas tendrán que pensar en cómo pueden utilizar tecnologías como el routing por segmentos o la infraestructura centrada en aplicaciones (ACI) de Cisco para crear una arquitectura integrada y automatizada que les permita administrar el tráfico de forma eficiente a través de la red. Y tendrán que pensar en administrar la seguridad desde el inicio del proceso.
CORD: un movimiento mundial
Una fuente clave de soporte para los proveedores de servicios para el diseño de redes distribuidas es el proyecto CORD (Oficina central rediseñada como data center) . CORD, que cuenta con el respaldo de una serie de empresas tecnológicas líderes en todo el mundo, trabaja para que sea posible ofrecer las funciones tradicionales de un data center en la capa externa de red.
Los principales proveedores de servicios no dudan de que las redes dispersas a las que CORD ofrece soporte sean parte del futuro. Andre Fuetsch, vicepresidente ejecutivo de arquitectura y diseño de AT&T, afirmó que su empresa “respalda los objetivos y logros que CORD representa”.
“El trabajo está ampliando los límites de numerosas tecnologías y arquitecturas, así como de hardware de código abierto y especificaciones abiertas”, afirmó Fuetsch el año pasado . “Estamos aprendiendo de los experimentos y ensayos con CORD y empleando este conocimiento para perfeccionar la nube integrada de AT&T”.
Otra empresa a bordo del proyecto es el proveedor de data center Equinix. Su director de tecnología, Ihab Tarazi, afirmó que la empresa “planea colaborar en el proyecto CORD y desplegar el stack de software de CORD en el hardware de Open Compute Project”.
Las empresas de este tipo saben que la creación de una estructura de funciones de red más distribuida será esencial si quieren respaldar las necesidades de los servicios de streaming y los motores de búsqueda, así como de las redes 5G. Es un verdadero desafío, pero los proveedores de servicios que se esfuerzan por superarlo cosecharán las recompensas en los próximos años.
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